La revista new scientist de marzo de 2015
presenta un debate respecto a si nuestra realidad depende del azar o si todo
esta estrictamente conectado por una fuerza superior que mueve toda la realidad
a su conveniencia, Imaginemos entonces que son dos equipos de futbol.
Tomas de Aquino, era el más diplomático ya que digamos
no jugaba para ninguno de los dos
equipos al postular que para que el universo pudiera existir debería, haber
cierto grado de libre albedrío entre los
humanos; al mismo tiempo los humanos están por fuera de las esferas divinas en
las que se producen eventos fuera del control humano (azar).
Newton fue el primero en meter un gol a favor de lo predecible al refutar
con su ley que los cuerpos del universo
y los planetas no giran al azar si no que existe una fuerza que los hace mover
en X o Y dirección llamada gravedad.
Con la aparición de la teoría del famoso efecto
mariposa se empato el partido. El aleteo
de un mariposa en Colombia puede crear un tornado en Texas. De acuerdo a esta teoría, que lo que llamamos azar no es más que falta de
información acerca de los eventos que pasan más allá de nuestra visión.
Hoy en día, la física cuántica se ha convertido
en lo más cercano que se tiene sobre lo
que podría considerarse una explicación de la realidad y es en esta disciplina
donde se ve que también hay científicos que juegan en equipos rivales:
La revista opina que hasta ahora el equipo que
juega a favor del azar en la física cuántica ha ganado todos los partidos. Dale
a un átomo de luz la posibilidad de
pasar a través de un espejo; puede que pase o puede que se refleje. Espera que
una partícula radioactiva emita un atomo, puedes esperar un milisegundo o un
siglo.
Anotando goles en el equipo rival existen casos
como la ecuación de Schrödinger que determina a través de probabilidades como será
la posición de un electrón a través del tiempo. Pero esto no es seguro; la
física cuántica dice que si quisiéramos, podríamos traspasar una
pared, eso implica que todos y cada uno de los átomos del cuerpo estén en una posición tal que
puedan pasar por los espacios vacios de los átomos de la pared. La probabilidad
de que eso ocurra es ridículamente baja.
Este debate entre azar y las predicciones exactas aun
sigue siendo uno de los grandes misterios de la humanidad ya que no se sabe a
ciencia cierta si con la suficiente información es posible saber cual va a ser el futuro con exactitud o si
simplemente el futuro es imposible de predecir porque hay muchos factores que
son ajenos a la naturaleza humana.El interrogante de quien gana esta
partido aun sigue remanente para muchos